Les presentamos 5 trucos para detectar mentiras en Whatsapp, un medio de mensajería que, además de facilitar de un forma cómoda y barata la comunicación, es capaz de generar un sin fin de malentendidos (tanto espontáneos como intencionados).
Por razones obvias, todos sabemos que al mantener contacto directo, es decir, al tener conversaciones de forma presencial, es relativamente sencillo percibir aquellas informaciones inciertas (todo depende de las dotes para la mentira y su captación de los interlocutores); expresiones, tartamudeos, gesticulaciones, miradas todos son elementos que inciden considerablemente a la hora identificar verdades y mentiras.
Resulta evidente que la comunicación digital conlleva diversos beneficios; nos permite charlar con personas a miles de kilómetros de distancia, y no sólo eso, también somos capaces de dirigirnos a la persona que prefiramos de forma específica y prácticamente en el momento que deseado.
Sin embargo, además de hacernos cada vez más dependientes de nuestro celular, este tipo de comunicación facilita muy considerablemente la proliferación de mentiras (por piadosas que sean), así como un sin fin de variopintos engaños. Presten atención a estos cinco sencillos trucos para ayudarles a estar siempre alerta. Pero recuerden que esto únicamente son consejos, no se trata de ninguna verdad empírica (no es nuestra intención alarmar a nadie).
1. Supongamos que están manteniendo una conversación fluida con esa persona que tanto les importa cuando, tras realizar una pregunta un tanto incómoda, el tiempo de respuesta se demora de forma notable ¡Bingo! (Ahí está pasando algo raro). Es posible que el supuesto mentiroso haya tardado en responder por múltiples razones pero No es demasiada casualidad que justamente sea en ese preciso momento? Así que ya lo saben, si desean realizar alguna pregunta un poco más profunda, traten primero de establecer una conversación fluida y en el momento clave háganla.
2. Las mentiras en persona son relativamente fáciles de detectar, las dudas y balbuceos previos a una respuesta suelen delatar al mentiroso. Pues bien, en este tipo de comunicación sucede exactamente lo mismo. Así, dado que la aplicación Whatsapp nos indica el momento concreto en el que la otra persona nos está escribiendo, si detectan que tarda demasiado en responder a esa pregunta caliente, tal vez sea porque está editando una y otra vez su respuesta evasiva. También cabe la posibilidad de que esté tratando de responder de la forma más clara posible pero No se tratará nuevamente de una extraña casualidad que sea ante esa pregunta?
3. Pongámonos en la situación anterior; acabamos de realizar esa pregunta un tanto incómoda y, efectivamente, la otra persona está editando su respuesta aunque el mensaje nunca termina de llegarnos. Ha pasado mucho tiempo escribiendo, de eso estamos más que seguros, y cuando por fin nos llega, se trata de una respuesta muy, pero que muy corta. Mucho tiempo para tan pocas palabras ¿No creen? Algo me dice que le está costando demasiado enfrentarse a esa pregunta; justamente lo mismo que sucedería en una conversación presencial, sólo que esa ocasión no podemos ver su cara de nerviosismo; únicamente podemos intuirla.
4. Hoy me he levantado dispuesto a teclear esa preguntar que tanto tiempo llevaba pensado hacer a esa persona. Perfecto, está en línea, esta es mi ocasión, comenzaré por establecer una conversación fluida lo tengo, llegó el momento de disparar la pregunta. Ahora sólo queda esperar su respuesta pero ¿Ya no está en línea? ¿Ahora vuelve a estar? ¿Otra vez nada? Pasado un tiempo reciben un mensaje que no se refiere para nada a la pregunta, la evasiva es algo así como me estoy quedado si wifi o no me funciona el móvil. Esto no huele nada bien, parece ser el viejo truco de me quedé sin cobertura qué casualidad ¿Verdad? De lo que puedo estar seguro es de que, en ese impasse temporal, el supuesto mentiroso tuvo tiempo más que suficiente para pensar la mejor de las repuestas a mi pregunta incómoda.
5. El último consejo para detectar mentiras es muy simple, sólo basta con mirar una de las opciones que nos ofrece la famosa aplicación de mensajería; ver su última conexión. Supongamos que la persona preguntada nos informa de que no se ha conectado en todo el día, ignorando por completo que nosotros sabemos que se conectó hace no demasiado (y durante un tiempo considerable). Es posible que no leyera nuestra pregunta durante su anterior conexión pero ¿Qué necesidad tendría de mentir de ser ese el caso?
¿Y ustedes qué opinan?
Por razones obvias, todos sabemos que al mantener contacto directo, es decir, al tener conversaciones de forma presencial, es relativamente sencillo percibir aquellas informaciones inciertas (todo depende de las dotes para la mentira y su captación de los interlocutores); expresiones, tartamudeos, gesticulaciones, miradas todos son elementos que inciden considerablemente a la hora identificar verdades y mentiras.
Resulta evidente que la comunicación digital conlleva diversos beneficios; nos permite charlar con personas a miles de kilómetros de distancia, y no sólo eso, también somos capaces de dirigirnos a la persona que prefiramos de forma específica y prácticamente en el momento que deseado.
Sin embargo, además de hacernos cada vez más dependientes de nuestro celular, este tipo de comunicación facilita muy considerablemente la proliferación de mentiras (por piadosas que sean), así como un sin fin de variopintos engaños. Presten atención a estos cinco sencillos trucos para ayudarles a estar siempre alerta. Pero recuerden que esto únicamente son consejos, no se trata de ninguna verdad empírica (no es nuestra intención alarmar a nadie).
1. Supongamos que están manteniendo una conversación fluida con esa persona que tanto les importa cuando, tras realizar una pregunta un tanto incómoda, el tiempo de respuesta se demora de forma notable ¡Bingo! (Ahí está pasando algo raro). Es posible que el supuesto mentiroso haya tardado en responder por múltiples razones pero No es demasiada casualidad que justamente sea en ese preciso momento? Así que ya lo saben, si desean realizar alguna pregunta un poco más profunda, traten primero de establecer una conversación fluida y en el momento clave háganla.
2. Las mentiras en persona son relativamente fáciles de detectar, las dudas y balbuceos previos a una respuesta suelen delatar al mentiroso. Pues bien, en este tipo de comunicación sucede exactamente lo mismo. Así, dado que la aplicación Whatsapp nos indica el momento concreto en el que la otra persona nos está escribiendo, si detectan que tarda demasiado en responder a esa pregunta caliente, tal vez sea porque está editando una y otra vez su respuesta evasiva. También cabe la posibilidad de que esté tratando de responder de la forma más clara posible pero No se tratará nuevamente de una extraña casualidad que sea ante esa pregunta?
3. Pongámonos en la situación anterior; acabamos de realizar esa pregunta un tanto incómoda y, efectivamente, la otra persona está editando su respuesta aunque el mensaje nunca termina de llegarnos. Ha pasado mucho tiempo escribiendo, de eso estamos más que seguros, y cuando por fin nos llega, se trata de una respuesta muy, pero que muy corta. Mucho tiempo para tan pocas palabras ¿No creen? Algo me dice que le está costando demasiado enfrentarse a esa pregunta; justamente lo mismo que sucedería en una conversación presencial, sólo que esa ocasión no podemos ver su cara de nerviosismo; únicamente podemos intuirla.
4. Hoy me he levantado dispuesto a teclear esa preguntar que tanto tiempo llevaba pensado hacer a esa persona. Perfecto, está en línea, esta es mi ocasión, comenzaré por establecer una conversación fluida lo tengo, llegó el momento de disparar la pregunta. Ahora sólo queda esperar su respuesta pero ¿Ya no está en línea? ¿Ahora vuelve a estar? ¿Otra vez nada? Pasado un tiempo reciben un mensaje que no se refiere para nada a la pregunta, la evasiva es algo así como me estoy quedado si wifi o no me funciona el móvil. Esto no huele nada bien, parece ser el viejo truco de me quedé sin cobertura qué casualidad ¿Verdad? De lo que puedo estar seguro es de que, en ese impasse temporal, el supuesto mentiroso tuvo tiempo más que suficiente para pensar la mejor de las repuestas a mi pregunta incómoda.
5. El último consejo para detectar mentiras es muy simple, sólo basta con mirar una de las opciones que nos ofrece la famosa aplicación de mensajería; ver su última conexión. Supongamos que la persona preguntada nos informa de que no se ha conectado en todo el día, ignorando por completo que nosotros sabemos que se conectó hace no demasiado (y durante un tiempo considerable). Es posible que no leyera nuestra pregunta durante su anterior conexión pero ¿Qué necesidad tendría de mentir de ser ese el caso?
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